El australiano Leif Podhajsky está revolucionando el mundo del arte, ya que crea obras que rompen con las formas más tradicionales de representar la realidad. En sus cuadros se puede apreciar composiciones surrealistas y colores combinados.
Otros artistas que también apuestan por esta técnica son Elena Vizerskaya, Catrin Welz-Stein, Aykut Aydoğdu o Thomas Dodd.
Este último destaca porque entremezcla la fotografía con el arte clásico. “La tecnología se hace cada vez más invisible para el público. Los códigos, los algoritmos… Es algo tan sofisticado que apenas se ve. En estos momentos estoy trabajando con robots que imitan la mano del artista tradicional. Hay piezas que parecen que son óleo sobre lienzo, y, en realidad, están producidas por máquinas”, explica Daniel G. Andújar.
El término ‘Net art’ comenzó a utilizarse en los años 90 para abordar el mundo del arte en la red. “Permitía que confluyesen e interactuaran comunicaciones y gráficos, email, textos e imágenes; facilitando que los artistas, entusiastas y críticos de la tecnocultura intercambiaran ideas y compartieran un interés común en el mantenimiento de un diálogo permanente”, dice Rachel Greene en su libro ‘Internet art’.
Los primeros artistas en utilizar las tecnologías para expresar el arte fueron Alexei Shulgin, Heath Bunting, Jodi, Vuk Ćosić y Olia Lialina.
“Explotaron al máximo las posibilidades de la red, no solo creando obras de forma individual o conjuntamente, sino constituyendo comunidades artísticas para favorecer el debate y difundir sus trabajos”, explica la doctora en Bellas Artes, Marta López López en su tesis.
Uno de los primeros proyectos fue Net.art per se (CNN interactive), lo presentó Ćosić en el año 1996. El artista imitaba la web de la cadena estadounidense, creando un índice para acceder a otras páginas y también para poder acceder a la conferencia Net.art celebrada en Trieste.
“Esta obra era una parodia y apropiación de los medios de comunicación populares, que estaban bajo sospecha en ese momento debido a la proyección de información cada vez más mercantilizada”, afirma Greene.
Un año después el artista Alexei Shulgin realizó el proyecto Desktop, porque recibió imágenes de los fondos de pantalla del ordenador de espectadores de varias partes del mundo.
“El archivo de todo este material privado hecho público formó parte de la primera muestra internacional de escritorios en línea, un referente inmediato del ‘screenshot art’ y que, a la vez, contemplaba las posibilidades infinitas de composición de singularidades jugando con los iconos de acceso directo y otros detalles de la pantalla de inicio”, señala la doctora en Bellas Artes.
La artista Lialina creó la obra ‘My Boyfriend Came Back From the War’, porque se inspiró en la discusión entre una chica y su novio que acaba de llegar de la guerra, y lo hace con formas simples de HTML.
“A medida que el espectador navega por esta obra, la trama narrativa se va desencadenando aleatoriamente, según la selección de hiperenlaces que se vaya haciendo en cada momento, pudiendo llegar a la incomprensión total”, explica la experta.
Las obras de arte reducen el estrés
Si te encanta el arte puedes decorar tu casa con cuadros y esculturas, pero es importante escoger obras de arte que te transmitan emociones. Las piezas de arte ayudan a crear espacios más acogedores y elegantes.
La artista de Esculturas Anglada informa que las esculturas deben ser bellas, pero también tienen que despertar los sentidos.
La escultura aporta elegancia, transmite sensibilidad y nos transporta a muchos lugares. Si quieres que destaque en el salón de tu casa opta por una iluminación neutra, te aconsejamos que esté cerca de la ventana.
Otro tip a tener en cuenta es que si tu decoración es neutra apuesta por una escultura que tenga colores muy marcados.
«El arte se utiliza en muchos tratamientos psicológicos para curar enfermedades mentales. De hecho, la “arteterapia” es una terapia que se utiliza desde principios del siglo XX, porque creando y admirando arte, cargamos nuestra vida de energía positiva», informa el diario La Vanguardia.
Varios estudios científicos han comprobado que las obras de arte reducen el estrés y mejoran el estado de ánimo. Los médicos de Canadá y de Bélgica aconsejan visitar los museos como tratamiento contra el estrés, incluso, en algunos hospitales han colocado obras de arte en las habitaciones para que los pacientes estén más relajados.
Los expertos explican que puedes ver los cuadros en una galería, pero si no te apetece salir de casa o no puedes desplazarte por motivos de salud, también puedes contemplar las obras desde el portátil.
¡Si quieres reducir el estrés apuesta por tener obras de arte en tu casa!