El año empieza con las nuevas tendencias en moda para lo que queda de invierno, la primavera que está por llegar y el verano que aun queda un poco lejos. Estas tendencias nos muestran una visión casi impuesta de la moda, a la que de una manera o la otra tendemos a adaptarnos inconscientemente.
Esta tendencia inconsciente a seguir las moda la tenemos de serie, ya que desde que somos muy pequeños nos enseñan que estar en la onda de la sociedad es importante para sentirse integrado en un grupo. Y esto es cierto en algunos sentidos, pero en otros no, pues los estándares sociales no siempre cubren los estándares personales.
En un claro ejemplo respecto a la moda tenemos las situaciones que se dan cuando los estilos personales no encajan o se alejan en exceso con lo que se entiende aceptado en una tendencia durante un determinado tiempo. Quizá esto pueda verse como un tema superfluo, pero no lo es, pues pensamos con “el piloto automático”, sin darnos cuenta de que esto puede generarnos ansiedad y sufrimiento en otros aspectos de nuestra vida.
Esta situación se puede traspapelar a otros aspectos de nuestra vida, y es que cuando uno de los grandes focos de ansiedad en nuestra vida es no cumplir con las expectativas sociales. Y aquí hay que decir que cada sociedad es diferente, y aunque actualmente la globalización ha impuesto ciertos estándares todavía existen muchas diferencias.
Es el caso de la forma de pensar asiática, muy alejada en algunos sentidos de la forma de pensar europea o continental. El ejemplo más claro que existe en Asia en comparación con Europa o América del norte y del Sur, es que el suicidio se produce con bastante frecuencia ante situaciones de vergüenza pública, algo bastante duro.
Llevar un estilo propio te puede ayudar de alejarte de estos estándares sociales, siempre que se entienda que no siempre es malo ser diferente de lo que impone la sociedad. En la variedad está el gusto, y esto es algo de lo que hablan los libros de psicología, el coaching y el mindfulness. Como recomendación en este sentido os recomendamos mirar a los libros que dispone sobre estas materias Ediciones Aljibe, no tienen desperdicio.
Reglas para marcar tu propia tendencia
Una de las cosas que tenemos que tener clara para tener nuestras propias reglas es todo aquello de la zona de confort que suena tan clásico de los libros de autoayuda. Puede resultar difícil arriesgarse, pero la realidad es que una vez que te arriesgas con algo con lo que te sientes cómodos y aciertas coges confianza para dar un paso más. Al fin y al cabo la moda es cómo una aventura constante en la que no sabemos que queda bien o no hasta que lo probamos.
Desconecta las notificaciones de las redes sociales, pues las redes sociales nos han enseñado una manera facilísima de compararnos con otras personas. Ten en cuenta que las redes sociales tienen mucho engaño, y probablemente las fotos se han repetido muchas veces hasta que ha salido la que ves. No todo es lo que parece, y compararse solo te hace ser igual a otro.
Además, para comparar dos situaciones estas deben de ser iguales, y esto es algo realmente de saber con seguridad si no sabemos todos los datos de las mismas (y suele ser así). Vivimos en un mundo en el que todo tiene que ser perfecto, y esto es una gran mentira por el hecho de que nada es perfecto, y precisamente las imperfecciones son lo que te hacen especial. Si lo que buscas es destacar entre los demás, entonces destaca aquellas imperfecciones que te hacen único, solo así te saldrás de los cánones.
Para realizar esto vas a encontrarte con tu mayor enemigo, tu mismo. Vas a tender a darle cinco mil vueltas a las situaciones que te planteas llevar a cabo, algo que se resuelve con relativa facilidad. Deja de pensar tanto y permítete combinar estilos con los que te sientes cómodo, porque esto es lo importante.
Al fin y al cabo, “a quien le importa lo que yo diga, a quien le importa lo que yo haga”